1. Estrategias de las Aduanas

Las administraciones de Aduanas del mundo entero juegan un rol de vital importancia en la implementación de una serie de políticas gubernamentales importantes y contribuyen al logro de diversos objetivos de desarrollo nacional. Además, como la aduana es el primer contacto que se tiene con un país, la primera impresión influye sensiblemente en las opiniones de las personas y de las organizaciones encargadas de tomar decisiones claves en materia de comercio y de inversiones extranjeras.
Sin una administración de Aduanas eficaz y rentable, los poderes públicos no podrán cumplir los objetivos políticos que se han fijado en materia de recaudación de ingresos, facilitación del comercio, estadísticas comerciales y de protección de la sociedad contra diversos peligros que recaen sobre la sociedad y la nación. La participación de la aduana en el desarrollo nacional constituye un enorme potencial y puede incidir considerablemente en las vidas de numerosas víctimas de la pobreza en el mundo.
Como tal, una inversión bien concebida y perfectamente seleccionada en materia de desarrollo de capacidades, destinada esencialmente a mejorar la eficacia y la rentabilidad de las administraciones de aduanas, puede producir grandes dividendos, tanto a los gobiernos como a los donantes, y permitir también a los países en desarrollo sacar provecho de las numerosas posibilidades de desarrollo que les ofrece un sistema comercial mundial en expansión.
Para asegurar que las iniciativas de la aduana en materia de desarrollo de capacidades respondan a los objetivos deseados, es indispensable que las organizaciones internacionales cooperen y coordinen sus esfuerzos y estrategias en esta área a fin de reforzar y mantener las capacidades aduaneras en el mundo entero.
Estrategias de la Aduana de México por el PACIC

El gobierno mexicano anunció recién la eliminación de los aranceles a las importaciones de productos alimenticios clasificados en 72 fracciones arancelarias.
El Paquete contra la inflación y la carestía (PACIC) es una medida para reducir los precios de artículos que conforman la canasta básica y tratar de reducir la inflación.
De las 72 fracciones arancelarias, el desmantelamiento para 66 fracciones entrará en vigor este próximo martes y la liberalización estará vigente por un año, el cual podrá ser prorrogable por un periodo.
Estrategia de la Agencia Nacional de Aduanas
Al respecto, la Agencia Nacional de Aduanas publicó un comunicado en el que señala sobre lo que se anunció en el Diario Oficial de la Federación (DOF):
1. Las fracciones arancelarias contenidas en los Artículos 1 y 2 del Decreto publicado es inusual en las operaciones realizadas en esta Unidad Administrativa, en aras de acrecentar la importación de dichas mercancías contenidas en los artículos.
Dicho punto abundó que se implementó un esquema de agilización para el despacho expedito de esas operaciones, a fin de liberar la saturación operativa que se presenta en los puertos marítimos y fronterizos.
2. Referente a la reducción de costos, se exhorta a utilizar el horario de las 9:00 a las 13:00 horas, el cual representa un 15% de operaciones en comparación con las presentadas el resto del día.
La recomendación va encaminada a evitar la sub utilización del personal e infraestructura de la aduana.
Así, permite un mayor número de operaciones y reducción de los tiempos de estadía y transporte para el importador.
3. En lo que respecta al tiempo de despacho aduanal, es importante mencionar el beneficio de servicio extraordinario, el cual permite ampliar los horarios de reconocimiento.
También busca incrementar el tiempo para el despacho de mercancías listadas anteriormente a 24 horas, dando prioridad y agilización a dichas solicitudes.
Estrategia e instrumentos de la OMA para promover la ética en aduanas

Pocos son los servicios de la administración pública que, como la aduana, reúnen también las condiciones previas clásicas que conducen a la corrupción institucional. La fuerte combinación de un monopolio administrativo asociado al ejercicio de un poder discrecional, en particular en un entorno de trabajo que puede carecer de sistemas adecuados de control y de responsabilidad, puede dar fácilmente lugar a la corrupción. Una administración de aduanas infectada por la corrupción será ineficaz y el impacto de dicha corrupción se sentirá en toda la sociedad.
Por más de una década, la OMA se ha esforzado por resolver el problema complejo de la corrupción en el servicio público y más particularmente al interior de la aduana. A fines de los años 80, cuando hablar abiertamente acerca del problema de la corrupción en un foro internacional se consideraba tabú, la OMA reconoció y admitió que la corrupción podría poner en peligro la eficiencia y la eficacia de los servicios de aduanas.
La OMA se ha fijado como objetivo la elaboración de una estrategia global y de un programa a fin de promover la ética aduanera. Desde entonces, la estrategia y el programa de la OMA en materia de ética han progresado en fases lógicas. En la fase 1 se desarrolló una estrategia de gran amplitud para abordar el tema de la ética aduanera. Este trabajo originó la adopción de la Declaración de Arusha en 1993. En la fase 2 se desarrollaron un mecanismo institucional (creación de un Grupo de trabajo sobre ética, actualmente el Subcomité de integridad del CTP) e instrumentos de apoyo (Guía de ato-evaluación en materia de ética de la OMA y el Modelo de código de conducta), así como el Plan de acción. En su fase actual, el trabajo de la OMA sobre la ética se caracteriza por la consolidación, integración y promoción de sus instrumentos e iniciativas. La OMA ha adoptado la Declaración de Arusha revisada durante sus sesiones del Consejo en 2003. A fin de ayudar a los Miembros a implementar esta Declaración, la OMA ha elaborado la Guía para el desarrollo de la ética, como un conjunto de herramientas en materia de ética, que incluye los instrumentos de apoyo existentes.
Los esfuerzos realizados a nivel mundial y regional, por mejorar la ética aduanera, han sido numerosos. La Declaración de Maputo, adoptada en marzo de 2002 por los Directores de aduana del continente africano, es un ejemplo clave.